2.- La Naturaleza del mundo imaginal
El "mundo imaginal" está presente en casi toda la obra de Ibn Arabí, sobre todo, tras el año 590 (Hégira). Para ilustrar esto, debemos decir que su enciclopedia sufí "Al-Futûhât al-makkiya" comienzo con un discurso que relata los detalles de un sueño sublime que tuvo lugar en el mundo imaginal. Dedica decenas de páginas en sus escritos, además de su obra "Al-Isra ilá I-Maqâm al Asra" ( escrita en 594 Hégira, a sus 34 años), a hablar de viajes terrestres y de ascensiones celestes que tuvieron lugar en el mundo imaginal, Además de todo esto, dedica el capítulo octavo de Futûhât a presentar el mundo imaginal: cuál es su naturaleza, dónde se localiza, cuándo y cómo se entra, quiénes son sus habitates, cuáles son sus ciudades, etc.
Explicaremos a continuación, de forma breve, las cuestiones expuestas anteriormente:
- ¿ Qué es el mundo imaginal?
El mundo imagina es un mundo distinto, un mundo de imágenes visibles, pero no tangibles, que se encuentra entre los dos mundos que constituyen la existencia universal y a los que se parece: el mundo visible y el mundo invisible.
- ¿ Dónde se encuentra el mundo imaginal?
El mundo imaginal es un mundo ístmico ( barzajî), existente e inexistente al mismo tiempo. Esto quiere decir que es un mundo que no tiene localización exacta en el mapa del universo. Como contrapartida, puede manifestarse, tanto en el mundo invisible como en el mundo visible.
- ¿ Cómo entra el hombre en este mundo sin lugares físicos?
El hombre entra en él con su espíritu o con su cuerpo etéreo, no con su cuerpo natural, ya sea despierto o dormido. El sueño es una experiencia común a todos los hombres: durante el sueño, el espíritu se separa del cuerpo natural manteniéndose unido a él por un lazo etéreo flexible. Entonces, el espíritu que duerme, comienza sus viajes a través del mundo imaginal que se asimila a todas las imágenes de cosas abstractas y tangibles, móviles e inmóviles. En ese momento ve todo lo que se le permite ver, después vuelve a través de ese lazo a su cuerpo, provocando que despierte o esperando despertar.
Sin embargo, al entrada en el mundo imaginal estando despierto es una experiencia excepcional. Cedemos la palabra a Ibn Arabí para que nos cuente como ocurre: " Esta tierra ( el mundo imaginal) no acepta ningún cuerpo humano natural hecho de arcilla. Cuando los conocedores entran en ella, lo hacen con sus espíritus y no con sus cuerpos. Abandonan sus cuerpos en el mundo de abajo. En esta tierra, formas extraordinarias de belleza inaudita vigilan las vías de entrada a nuestro mundo de tierra y de cielo, de paraíso y de infierno. Cuando alguno de los conocedores, sea humano, genio, ángel o habitante del paraíso, quiere entrar para adquirir algún conocimiento despojándose de su cuerpo, se encuentra con estas formas encargadas de la vigilancia en la entrada de las vías. Ellas se le acercan y le ofrecen un hábito que corresponda a su estación espiritual, luego lo acompañan paseándolo por esta tierra para que tome asiendo donde le plazca.. " Este extracto nos muestra que este mundo imaginal tiene cuatro puertas, cada una de ellas abierta a un lado del universo. Los humanos, los genios, los ángeles y los habitantes del paraíso entran por esas puertas: una se abre a la tierra, otra al cielo, otra al paraíso y otra al infierno. Los guardianes del mundo imaginal son los responsables de cada puerta y de cada persona que entra.
En cuanto a la razón que llevaría a un humano a entrar en el mundo imaginal, se estudiará en la siguiente sección del texto.
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